El encuentro se lleva a cabo en Sidney, Australia, y por Paraguay participan representantes de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).
El presidente del gremio, José Berea, explicó que en dicho encuentro se reafirmó que “el principio de no poner impuesto a la exportación debe regir para todos, porque resta competitividad”.
El documento firmado por las principales agrupaciones de productores, exportadores y comercializadores de oleaginosas miembros de este bloque, indica que “los miembros del Diálogo Internacional de Productores de Oleaginosas (IOPD) se oponen a los impuestos a la exportación o cualquier impuesto diferenciado debido al alto impacto en la competitividad y en las distorsiones productivas, distorsiones comerciales y en la instalación de inversiones”.
De esta instancia participan organizaciones de Estados Unidos, Brasil, Argentina, Francia, Canadá, Australia, Alemania, Reino Unido, Malasia y Paraguay; es decir, todos los países que actúan en el comercio mundial de granos, especialmente soja.
“Es importante este pronunciamiento porque marca un mismo criterio en los países productores”, manifestó Berea. En todos los países donde se trató de aplicar tuvo el mismo impacto, dijo y recordó el caso Argentina, durante los gobiernos de los Kirchner, que aplicó un impuesto del 30% a la exportación de soja.
Actualmente, el país vecino se encuentra en un proceso de disminución de ese porcentaje para el mencionado grano. Por otro lado, Berea dijo que están dispuestos a leer y analizar propuestas diferentes al proyecto que pretendía gravar el 15% del valor total de la exportación de granos.