Así lo previó su canciller José Serra para que el nuevo presidente brasileño haga su entrada en el cónclave que reúne a las naciones más industrializadas del planeta y a los países emergentes que representan el 81% del producto interior bruto mundial. Además se realiza en China, uno de los principales socios comerciales del Brasil.
Allí, Temer tendrá la oportunidad de relacionarse con sus pares de los principales países del mundo, como el caso de Barack Obama, de Estados Unidos.
Temer ya tiene pautada una entrevista con el presidente español Mariano Rajoy. A esa misma cumbre participará Mauricio Macri, su principal socio en Latinoamérica, y a quien Estados Unidos califica como la persona que lleva el liderazgo en la región. No está aún pautada una reunión entre Macri y Temer.
Itamaraty también había adelantado que una vez que se definiera el juicio político Temer realizaría una visita al Paraguay, aunque no se tiene una fecha prevista para ello.
El nuevo Gobierno de Brasil, ni bien habían suspendido a Dilma Rousseff de la presidencia, ya había adelantado una agenda pendiente con el Paraguay que incluye la permeabilidad de la frontera con el Paraguay donde prolifera el narcotráfico, el tráfico de armas y el contrabando que afecta a los intereses de la mayor potencia de Sudamerica.
En la frontera entre ambos países, del lado paraguayo operan bandas criminales lideradas principalmente por brasileños y que operan también con capital brasileño.
En dicha ocasión Serra adelantó que iban a presionar al Paraguay para que combata esos crímenes y había ofrecido la ayuda del Brasil, pero el trabajo duro deberá asumir la parte principal del trabajo.