El británico, segundo en el campeonato mundial de automovilismo en Fórmula Uno y que disputa el título a su compañero de equipo, el alemán Nico Rosberg, fue homenajeado este miércoles en la azotea del Mirante do Vale, que ya fue el edificio más alto de Brasil.
Hamilton dio las pinceladas finales de la obra de Los Kueios, artistas urbanos que se hicieron famosos por sus grafitis de conejos esparcidos por la mayor ciudad suramericana.
El evento, organizado por la multinacional alemana de artículos deportivos Puma, contó también con la participación del artista brasileño Liam Bononi, famoso por sus trazos delicados en obras de arte urbano instaladas en varios países.
El mural de ocho metros, con el rostro de Hamilton y sus tatuajes en formas de cruz y corazón, hace referencia al primer título mundial que el británico conquistó en 2008 durante el Gran Premio de Brasil, que volverá a disputarse este fin de semana en el Autódromo de Interlagos.
Los artistas, que elogiaron las habilidades de Hamilton con el ‘spray’, entregaron al final del evento al piloto un cuadro pintado por ellos con el rostro del fallecido tricampeón mundial brasileño Ayrton Senna, el mayor ídolo del británico.
