El hallazgo fortuito se produjo cuando un vecino que estaba cultivando mandioca entró al bosque. El lugar está ubicado en la fracción Núñez. Ambos habrían sido enterrados hace 10 días aproximadamente, según la presunción de la médica forense Ramona García.
Los cadáveres presentaban avanzado estado de descomposición; tuvieron que ser desenterrados y trasladados a la morgue de una funeraria para su inspección correspondiente. En el lugar, fueron reconocidos por los familiares.
Los jóvenes presentaban el rostro y parte de la cabeza desfigurados, con rastros de haber sido golpeados con un arma contundente. Uno de ellos además tenía dos heridas con arma de fuego, una en el cráneo y otra en el brazo.
Los investigadores policiales y del Ministerio Público solo tienen conjeturas de la causa de la muerte; una de ellas apunta a que se trata de un crimen que tiene como trasfondo el narcotráfico.
La fiscala Zunilda Martínez afirmó ayer que tienen información de que los afectados viajaban frecuentemente hacia Pedro Juan Caballero y también al Brasil. (E.M)