Los aparatos serán destinados para que los agentes municipales puedan ejercitarse diariamente, de manera a estar en forma para desarrollar su trabajo en las avenidas y calles de la ciudad, el cual en la mayoría de los casos plantea muchas exigencias y tiene además su dosis de violencia con la resistencia de los conductores.
En la referida unidad explicaron que sus uniformados de las diez bases podrán hacer caminatas o trotes en cintas magnéticas, fortalecer brazos y piernas con pesas o simplemente mejorar su condición física.
Los efectivos al servicio de la Comuna capitalina no pueden portar armas de fuego ni cachiporras, como sus pares de la Policía Nacional, lo que muchas veces les complica a la hora de detener a automovilistas o motociclistas que cometen infracciones, de manera a aplicarles las multas correspondientes.