“El análisis de llegar al grado no se puede mirar desde una visión estática de un evento, sino es una trayectoria que se viene realizando. Paraguay ha llegado al nivel de BB, que es donde hoy estamos. No es resultado de una medida o de una acción económica, o de una acción política, sino que es un proceso que Paraguay ha iniciado hace más de una década, un proceso de estabilidad macroeconómica, medidas de políticas públicas, y principalmente también de un desarrollo y un dinamismo del sector privado”, detalló.
A Paraguay, como a las otras naciones, un solo evento no le hace retroceder, como tampoco le va a llevar a que tenga el grado de inversión, apuntó. Dijo que los inversionistas, así como las calificadoras de riesgo, hacen un análisis en el conjunto, en el contexto de dónde está Paraguay y lo que sucedió el fin de semana fue un evento que no es algo natural, porque los paraguayos no somos así (violentos) y lo que pasó fue algo totalmente extraordinario.
“Yo lo que creo es que tenemos que seguir trabajando, nos quedan todavía grandes reformas por delante, seguridad social, mayor inversión en educación, mayor inversión en infraestructura; y bueno, eso es lo que nos va a acercar finalmente a tener grado de inversión, no va a ser un hecho, un evento, sea económico o político, sino una combinación, y tener una visión conjunta como país de que estamos avanzando en el camino correcto”, recalcó.
Paraguay está en el medio de grupo de países que ha avanzado, pero todavía no es un país como Chile, remarcó.
