EFE
“Identificamos a siete y están todos sanos y salvos, no hay ningún problema más allá de los problemas en una zona que ha sido devastada por un terremoto, en materia de telecomunicaciones, de acceso a dinero a través de cajeros y de movilidad para otros lugares más seguros”, declaró el canciller en una rueda de prensa.
Entre ellos, dos jóvenes que se encontraban incomunicados desde la notificación del sismo fueron localizados este lunes y están en contacto con la Embajada uruguaya en India.
En su cuenta de Facebook, uno de ellos, Federico Waksman, publicó un mensaje en el que avisa que se encuentra bien, agradeció la preocupación y lamentó no haber podido comunicarse antes.
“El terremoto nos agarró en nuestro camino al base camp del Everest pero por suerte no estábamos en zona de nieve. Vimos algunos desmoronamientos y casas derrumbadas pero por acá no fue tan grave por suerte. Ahora estamos bien y seguros en un pueblo llamado Khumjung, a un par de horas caminando de Namche”, contó el joven.
Cuestionado sobre una eventual retirada de los uruguayos de Nepal, Nin Novoa señaló que se está trabajando en ello.
“Estamos en contacto con la madre de una chica, la estamos sacando de esa zona y quiere volverse rápidamente a Uruguay, igual que los dos jóvenes”, afirmó.
Según el canciller, “el resto de las personas (uruguayas) que estaban allí estaban en excursiones o habitualmente viven (en la región) y el embajador (en India), Carlos Orlando, dice que no representan ningún problema del punto de vista de su seguridad”.
“Están todos sanos y salvos, cosa que nos alegra mucho”, resaltó.
El terremoto devastó el sábado gran parte del valle central de Nepal dejando viviendas destruidas, carreteras destrozadas y las telecomunicaciones y conexiones eléctricas afectadas en esa zona, donde se encuentra la capital Katmandú.
El país sigue aún con enormes problemas de comunicación tras la réplica de 6,7 grados del domingo, una de las más de 40 que se han producido desde el sábado.
De acuerdo con el último recuento oficial de víctimas, al menos 4.252 personas murieron y más de 7.000 se encuentran heridas.
Este terremoto es el de mayor intensidad en casi 80 años en el país y el peor que ha registrado la región en una década, desde que en 2005 un movimiento telúrico causó una tragedia de grandes dimensiones en Cachemira, con un balance de más de 84.000 muertos.