El funcionario dijo que el Gobierno está observando de cerca el desarrollo de la industria, tras la apertura del mercado argentino para la soja paraguaya, desde marzo.
Esto, debido a que la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) había denunciado que desde que Argentina estableció el nuevo régimen de importación, disminuyó la exportación de productos procesados en Paraguay. Los productores destinarían cada vez más granos al exterior, por lo que los industriales temen quedarse sin materia prima para procesar dentro de unos años.
Por esa razón, solicitaron al Gobierno establecer una “política espejo”, que permita un régimen de importación temporaria de granos de Bolivia, Brasil y Argentina, para paliar de esta manera las posibles fugas de granos de producción nacional.
“Ahora no hay indicios de que la exportación a Argentina pueda tener un efecto en la industria local, pero sí estamos mirando con cautela lo que pueda ocurrir en algunos años”, manifestó Stark.
Según los datos que manejan, las industrias están trabajando actualmente a altísimos niveles de capacidad, casi en su totalidad, resaltó Stark.
“Estamos mirando, hay que ver la posibilidad de importación de soja de otros países, mediante un régimen parecido al que tiene Argentina”, dijo luego.
Reiteró que la línea del Gobierno es fortalecer a las industrias, para agregar valor a los productos antes de exportarlos en estado natural.
Aseguró que el Gobierno está en permanente comunicación tanto con los miembros de la Cappro como de la Cámara Paraguaya de Exportadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), que aglutina a los productores.
Los productores nacionales competirían con los de otros países dentro de Paraguay, en el caso de que se establezca un régimen parecido al que tienen en Argentina, para paliar la eventual fuga de granos a la nación vecina.
Capeco también se pronunció diciendo que no hay posibilidad de que las industrias queden desabastecidas pese al régimen argentino, debido a que la mitad de la producción nacional se procesa dentro del país, con las industrias trabajando en su capacidad total.
Otro pedido de la Cappro para incentivar la industria es que se devuelva el 100% del IVA a los productos industriales exportados.
“Se están haciendo los análisis más técnicos, sobre todo el impacto fiscal que va a tener. La ley podría permitir un espacio para hacerlo”, manifestó Stark al respecto.