El anuncio fue realizado por los ministros Juan Carlos Baruja (Agricultura y Ganadería) y José Molinas (Secretaría Técnica de Planificación).
Baruja explicó que tienen identificadas a 37.000 familias en pobreza extrema en el área rural. Refirió que no todas tienen vocación agropecuaria y se estima que unas 27.500 (unas 180.000 personas) sí se dedican a la producción agropecuaria.
“Si todo va bien, estimamos que estas familias estarían mejorando sus ingresos y saliendo de la pobreza extrema en un número significativo y sobre todo, sentando las bases de una producción sostenible que continuará año tras año más allá del apoyo inicial de este proyecto”, señaló el secretario de Estado.
El Gobierno contrató a 123 extensionistas, que están entrenando a las familias desde la semana pasada.
El ministro Molinas dijo que la intención es que vayan articulando un apoyo para que puedan producir alimentos de autoconsumo.
Una producción agrícola destinada a cadenas de valor y también un componente pecuario. Al asumir el Gobierno, en el 2013, el presidente de la República se había comprometido a reducir los niveles de pobreza extrema.