“Mucha gente se siente que no se beneficia del crecimiento y la globalización, tenemos que encararlo. De lo contrario, veremos más proteccionismo”, señaló en una rueda de prensa Schäuble, cuyo país ostenta la presidencia rotatoria del grupo, en la sede del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington.
El ministro alemán remarcó, además, el “amplio consenso” sobre los efectos negativos del proteccionismo, y destacó el “buen ambiente” existente durante el encuentro del grupo que incluye a los principales países avanzados y en desarrollo.
En esta ocasión, sin embargo, no hubo un comunicado conjunto del G2O, como es tradicional, después de la polémica desatada en la última reunión ministerial celebrada en Baden-Baden (Alemania) hace cinco semanas por la supresión de una frase en la nota en la que se rechazaban las medidas proteccionistas.
Esta eliminación fue impulsada por la delegación estadounidense encabezada por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, en su primera participación en una cumbre ministerial y en sintonía con la agenda de nacionalismo económico defendida por el nuevo presidente de EE.UU., Donald Trump.
Schäuble reconoció que en Baden-Baden hubo “ciertos problemas de comunicación”, pero subrayó que en esta ocasión todos los participantes habían destacado los beneficios de economías abiertas y el comercio global.
El encuentro del G20 se celebró en el marco de la asamblea de primavera del FMI y el Banco Mundial, que reúne en Washington a los principales líderes mundiales, y en la que el giro en la política económica de EE.UU. es uno de los principales temas de debate.