Por Juan Gayoso | Villarrica.
La medida adoptada por los superiores de ese organismo sería una consecuencia del apoyo de Careaga Roa a Rodolfo Friedmann Alfaro, en su condición de gobernador, ante la crisis planteada en esa institución gubernativa departamental.
Durante una entrevista concedida a la prensa, el ahora ex funcionario de la Defensoría del Pueblo refirió que ya venía siendo afectado por una especie de persecución política por la postura asumida. “No obstante, me sorprende esta cuestión porque no existe un argumento valedero. Esta mañana me entregaron la comunicación donde me entero de mi destitución, tras doce años de antigüedad”, dijo.
Más adelante, Careaga Roa recordó que entre los informes que había enviado últimamente desde la Defensoría del Pueblo a la central se encontraba el relacionado con la situación planteada en la Gobernación del Guairá.
“Debido a ello me recomendaron que no me meta con lo que ocurra en la administración departamental, por tratarse de cuestiones políticas”, añadió.
“Ahora me doy cuenta de que esa fue una advertencia y la consecuencia es que hoy día estoy despedido”, subrayó el ex funcionario de la Defensoría.
“Yo he venido a cabalidad con las funciones que me competen, así que estoy tranquilo porque no cometí nada fuera de lugar”, señaló además.
Debemos acotar que la oficina de la Defensoría del Pueblo funcionaría en la sede de la Gobernación guaireña.
''El hecho de que me hayan destituido del cargo no significa que declinaré de mis ideologías ni mucho menos aceptar la voluntad de algunos principiantes de la política ni de los viejos’’, resaltó en otro momento.
Por otro lado, en la Gobernación reina actualmente una incertidumbre entre los funcionarios de la institución, sobre el futuro que les espera tras los cambios registrados últimamente. Nadie está seguro de poder permanecer en sus respectivas funciones, según manifestaron varios de ellos, que pidieron permanecer en el anonimato.