Por Elías Cabral - Curuguaty.
Mario Páez, quien regresó de sus vacaciones este lunes, acudió en vano a su lugar de trabajo ya que, según la denuncia, la magistrada dejó llaveada la puerta. La jueza Ramírez convocó a las fuerzas del orden a fin de evitar “cualquier eventualidad”. La misma no quiso conversar con los medios.
El funcionario manifestó que regresaba de sus vacaciones y se encontró con que la puerta de acceso al juzgado estaba cerrada. La jueza Ramírez se encontraba adentro con los demás funcionarios.
El funcionario refirió que tuvo un conflicto con su jefa a raíz de que en un caso de violencia intrafamiliar, a pedido de una de las partes tuvo que hacer constar en un acta sobre su incomparecencia de la jueza, por lo que fue suspendida la audiencia. Dijo que la jueza solo asiste dos veces a la semana a su despacho.
Mario Páez, además denunció a la jueza Nora Ramírez por maltratos, indicó que dijo palabras obscenas, irreproducibles, faltando el respeto, el decoro y la ética como magistrada judicial. También la responsabiliza por violación de una correspondencia particular y de quedarse con documentos personales.
La magistrada Nora Ramírez, quien convocó a las fuerzas del orden en el lugar supuestamente para evitar cualquier eventualidad, no conversó con este medio y permanece en su despacho encerrada.
En tanto, la jueza Arminda Núñez, superior de la jueza Ramírez, en comunicación telefónica informó que se estarán reuniendo de urgencia con sus pares para analizar la situación de la magistrada.
Robert Bogado, presidente del Colegio de Abogados de Curuguaty, dijo que funcionarios de la superintendencia de la Corte Suprema de Justicia estarán en el transcurso de este lunes en el lugar.