Esto, atendiendo que el próximo 23 de enero inician las clases en el marco de la recalendarización académica, aprobada por el interventor Ricardo Garay.
La asamblea tendrá lugar en la plazoleta Albert Einstein. La convocatoria está hecha para las 17.00.
Los estudiantes se encuentran en paro desde hace más de 160 días y exigen la renuncia del decano Éver Cabrera por considerarlo no apto para el cargo y por sus supuestos vínculos con la claque que maneja la institución. Entre movilizaciones y escraches, los universitarios habían solicitado al Consejo Superior Universitarios (CSU) la intervención de la Facultad para poder destrabar la crisis.
Tras presiones externas, finalmente el CSU nombró el 25 de noviembre (al cumplirse más de 100 días de paro) a Julián Agüero como interventor, quien renunció un mes después sin poder destrabar la crisis.
El 20 de diciembre se designó a Ricardo Garay como nuevo interventor y se desató una nueva crisis que involucró a docentes “institucionalistas” que amenazaron con ir a paro por estar en desacuerdo con la recalendarización. Por su parte, el gremio docente y el estudiantil estuvieron a favor de Garay.