La denuncia fue presentada por Liz Guillén –quien había sido vocera estudiantil durante la movilización de UNA No Te Calles–, luego de haber recibido el sábado último una amenaza, según señaló.
“Fue una acción voluntaria mía en el hecho de descargar la aplicación, eso no da derecho a ninguna persona a amedrentarme y mucho menos a amenazarme. El hecho de que la persona tenga la oportunidad de opinar sobre tu persona no le da el derecho de agredirte ni física ni sicológicamente”, manifestó Guillén en una entrevista a Noticias Paraguay.
Luego de haber recibido la denuncia, peritos informáticos del Ministerio Público se encuentran investigando el origen del mensaje anónimo que recibió la joven.
uso indebido. Sarahah tenía como objetivo principal ser empleada para enviar mensajes de amor anónimos, pero el uso ha derivado rápidamente a mensajes de acoso, insultos y amenazas.
La misma palabra árabe Sarahah significa honestidad y franqueza; sin embargo, desde el inicio de sus descargas causó polémica por transformarse en un instrumento para el hostigamiento en línea.
En los últimos días, se observaron diferentes publicaciones de adolescentes en las redes sociales, de los distintos tipos de acosos que recibían a través de la aplicación.