“Queremos pedir disculpas a las personas que en su momento hemos dañado”, dijo con voz temblorosa Higinio Alfredo Cáceres, a pocos minutos de haber comparecido ante el fiscal Emilio Fuster.
El hombre entrado en años es padre del jugador Víctor Cáceres, que el pasado sábado protagonizó un accidente de tránsito cuando al mando de una lujosa camioneta Range Rover, embistió contra una camioneta y un árbol.
El futbolista debía presentarse ayer a la mañana para prestar declaración, pero no acudió, aduciendo problemas de salud. A través de su abogado explicó que aún se encuentra internado bajo observación luego de los golpes que recibió tras el choque e internado en el Sanatorio Británico. En su lugar, acudieron sus abogados y se presentó a declarar su padre.
Luego de tomar declaración al padre del jugador, el fiscal Fuster, que investiga el caso por parte del Ministerio Público, informó que el futbolista fue imputado por exposición al peligro en el tránsito terrestre y obstrucción al resarcimiento. Uno de los elementos en que se apoya el fiscal para formular la imputación fue el resultado de la prueba de alcoholemia que le practicaron a Víctor Cáceres, que dio positivo 0,98 mg en un sanatorio privado.
Además del mediocampista que brilló en la Albirroja, también sus familiares fueron imputados por frustración de la persecución y ejecución penal y resistencia. Los mismos son: Higinio Alfredo Cáceres (padre del jugador), Paola María Cáceres (hermana) en tanto que Enrique Samaniego (cuñado) por frustración a la persecución de persecución y ejecución penal. El juez de la causa tendrá que resolver qué medidas se les dará.
prepotencia. Videos que se difundieron en las redes sociales reflejan el actuar prepotente de la familia, que llegó hasta el lugar minutos después de haber sucedido el choque y le llevaron a Cáceres, que se encontraba shockeado. El jugador, primeramente, chocó contra el vehículo en que viajaba Dionisio Navarro Vera junto a su familia y luego embistió contra una columna. Navarro había mencionado que el padre del Topo, Higinio Cáceres, actuó con prepotencia, al igual que otros familiares del futbolista, sacándolo del lugar antes de la llegada de agentes de la Fiscalía.
Higinio, al salir de la Fiscalía, reconoció su error y se justificó diciendo que su actuar fue producto de la desesperación por socorrer a su hijo . “Como padre, viéndole a mi hijo sangrando, tuve que actuar de esa forma”, explicaba en medio de temblores en la voz y en el cuerpo el padre del futbolista que se vio visiblemente afectado.