Por Justiniano Riveros y Virgilio Cáceres
CONCEPCIÓN
La tragedia que se registró en el móvil en el que iban dos militares de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y un agente de inteligencia de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) apunta a un atentado perpetrado por un motociclista. Así lo señaló el fiscal Joel Cazal al basarse en el testimonio del único sobreviviente, el agente especial Juan Jara, director de la Dirección Contra Terrorismo de la Senad.
Ayer, durante una conferencia de prensa el representante del Ministerio Público reveló parte de lo ocurrido el miércoles en Cuero Fresco, Yby Yaú, al explosionar una bomba que supuestamente tiró el motociclista al costado de la camioneta en que viajaban los hoy fallecidos, integrantes de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), el capitán de Ingeniería Enrique Daniel Piñánez Ciancio, el suboficial de Infantería José González Ferreira y Jara.
Las víctimas estaban regresando de la zona de Yby Yaú cuando vieron a un motociclista que estaba siendo seguido por actitud sospechosa (inteligencia manejaba que se entregarían artefactos explosivos) y que en el momento en que le pararon el hombre tiró un bulto al costado derecho de la camioneta.
Destacó que el motociclista se dio la vuelta hacia el lado este para fugarse y el chofer, Jara, salió del vehículo (dirección este a oeste) para tratar de aprehenderlo, pero en ese instante se produjo la explosión. “Él dice que hasta ese momento se recordó del hecho, luego ya quedó perturbado”, señaló Cazal.
Según fuentes de la investigación, miembros de la Agrupación Campesina Armada iban a recibir los explosivos. El motociclista resultó ser un integrante de la logística de los hermanos Albino y Alfredo Jara Larrea, líderes de la ACA, que fue reconocido por los agentes. Su perfil ya fue confeccionado gracias a un trabajo de inteligencia y lograron interceptarlo con la ayuda de informaciones confeccionadas de la zona de Yby Yaú. El nombre del brazo logístico se mantiene en reserva, pero según fuentes, el mismo proveía de la zona de Vallemí los artefactos explosivos a la ACA.
Los investigadores no descartan que esos explosivos iban a ser utilizados para atacar la comisaría de Cuero Fresco, según fuentes.
CONTRADICCIÓN. Luego de lo sucedido, Jara fue socorrido por una persona que, según el fiscal, fue solamente la que ayudó al agente especial. Sin embargo, una contradicción se dio, ya que Cazal señala que solo tres personas estaban en la camioneta siniestrada. Pero el doctor Sixto Barrios, director de la Clínica San Antonio, de Horqueta, en donde fue asistido el agente de inteligencia, dijo a Radio Regional que atendió a dos heridos, cuyas identidades no dio a conocer.
“Sí, yo atendí a dos heridos, uno muy leve, el otro requirió algunos estudios, pero de igual forma no revistió gravedad”, dijo el médico.
Ayer, a las 17:00 aproximadamente trasladaron los cuerpos de los militares de la zona de Concepción.