CURUGUATY
Al menos setenta familias allegadas a las víctimas de la masacre de Marina Cué, en Curuguaty, reingresaron en la madrugada de ayer a las tierras donde ocurrió el enfrentamiento entre policías y campesinos en el 2012. Según dijeron, era para ocupar el inmueble, donde se instalaron y empezaron a construir campamentos. Ellos exigen la entrega de las 2.000 hectáreas de tierra y la libertad de los presos y procesados por aquella tragedia que dejó 17 muertos, entre campesinos y policías.
Élida Benítez de Castro, madre del fallecido Adolfo Castro y de los procesados Néstor y Adalberto Castro –estos dos últimos fueron a prisión, pero luego de obtener el arresto domiciliario están aguardando el juicio oral y público–, aseguró que luego de tres años de indefiniciones por parte del Gobierno para entregar las tierras, finalmente decidieron ingresar a ocupar la propiedad, temprano, en la mañana de ayer.
“Entramos para exigir las tierras por las que tanto han luchado nuestros hijos hasta costarles la vida; por eso estamos aquí y permaneceremos hasta que nos hagan caso”, aseguró la mujer al momento de señalar que unas 60 a 70 personas ingresaron, pero que el próximo lunes aumentará la cantidad, previendo que se unirán más personas en el lugar.
“El Indert no nos define nada; en estos tres años, fuimos y vinimos hasta la institución, pero no obtuvimos ninguna solución”, precisó.
Por su parte, Lidia Ayala, otra ocupante y madre del fallecido Francisco Ayala y esposa de Delfín Duarte, también fallecido durante la masacre, refirió que formarán un campamento con carpas al pie de la cruz que fue erigida en nombre de los caídos, para resistir hasta tanto se entregue el inmueble a los familiares y se dé la libertad de los procesados por las muertes de policías.
“No vamos a entrar aún en el monte; aquí, cerca de la cruz, le vamos a esperar para hablar con nosotros”, dijo la mujer, quien se muestra decidida en sus intenciones.
El hecho coincide con el anuncio de los carperos, quienes salieron hace 23 días atrás de Marina Cué, con la promesa de conseguir tierra hacia Alto Paraná, pero debido a que hasta el momento no lograron acceder a ningún inmueble pusieron plazo hasta la próxima semana al Gobierno para dar solución al reclamo, según Jorge Ovelar, líder de los carperos, quien se encuentra en Minga Porá, acompañado por otras treinta personas; de lo contrario, dijeron que volverán a ocupar Marina Cué.