El abogado Pedro Almada explicó que la defensa presentará documentos al Ministerio Público para probar que Caballero no incurrió en ningún hecho punible. Recordó que el ex decano estuvo en el cargo durante un solo año y que anteriormente tuvo una trayectoria como docente intachable.
La imputación a Caballero es por lesión de confianza, que tiene una expectativa de pena de cinco años de cárcel y en los casos graves puede ser sancionado con hasta diez años de cárcel.
Los fiscales Martín Cabrera y Josefina Aghemo imputaron a Caballero por su supuesta responsabilidad en los comisionamientos irregulares de funcionarios de la universidad a la Cámara de Diputados y la Municipalidad de Lambaré. Según la hipótesis fiscal, varios de los “comisionados fantasmas” en realidad no estaban comisionados, por lo cual no prestaban servicio en la UNA ni en otra institución.