En comunicación con ULTIMAHORA.COM, Daisy Orzuza, estudiante de la filial de Ciencias Agrarias, manifestó que desde el viernes 2 de octubre, cuando ella y sus compañeros realizaron una manifestación pacífica en la Facultad, empezaron a recibir represalias.
Según los universitarios, el peor de todos los días fue este lunes 5 de octubre, cuando fueron visitados por el senador Robert Acevedo, quien fue a manifestar su apoyo a los universitarios, después de que se filtraran informaciones de amenazas y otras irregularidades en la filial.
La estudiante comenta que tras la retirada del senador aparecieron alrededor de 30 hombres en las inmediaciones de la Facultad, quienes rodearon la sede con camionetas y motocicletas, y con actitud prepotente amedrentaron a los estudiantes para que estos reaccionen contra ellos y se produzca un conflicto.
Aparentemente, según la información que se maneja, serían personas afines al partido del director de la filial pedrojuanina, José Quinto Paredes, quien es candidato a concejal.
“Nosotros nos asustamos mucho”, expresó Orzuza, al tiempo de señalar que posteriormente el director Paredes ingresó al predio de la Facultad escoltado por estos hombres, a pesar de que los universitarios en ningún momento le bloquearon la entrada o el paso a los funcionarios de la UNA.
Los estudiantes lograron ver cómo el director al momento de retirarse ese día de la Facultad llevaba consigo una mochila. Después de este hecho los estudiantes realizaron la denuncia por amedrentamiento a la comisaría de la zona, que fue posteriormente derivada a la Fiscalía.
Orzuza indicó que Paredes también realizó una denuncia en la comisaría contra los estudiantes por perturbación de la paz pública, después de que ellos se retiraran.
Desde ese lunes 5 de octubre los alumnos iniciaron la vigilia dentro de la Facultad, cerraron los accesos al edificio y prohibieron la entrada a los docentes, quienes ya se encontraban en paro.
Los alumnos alertaron que continúan con temor ante una posible quema de archivos, ya que existen sospechas de varias irregularidades en la filial de PJC, incluso, dentro del predio funciona una cooperativa denominada Defensores del Chaco, que aparentemente es manejada por los docentes.
Al principio los alumnos pedían la rendición de cuentas del presupuesto que se transfiere desde Asunción y del dinero que se recauda de la producción del campo experimental donde, entre otras cosas, se cosecha soja.
Sin embargo, señalaron que solo consiguieron como respuesta amedrentamientos y persecuciones de todo tipo. Los alumnos aseguraron que son perseguidos por vehículos extraños constantemente.
Por su parte, los estudiantes de la Facultad de Agronomía de la sede central de la UNA denunciaron la existencia de capturas de pantallas de intercambios de mensajes por WhatsApp entre el vicedecano Miguel Ángel Ruiz Díaz y otros colegas suyos, donde la alta autoridad expresa que le gustaría “fusilar” a uno de los estudiantes becados, refiriéndose a Felipe Benítez, presidente del Centro de Estudiantes de PJC, quien tiene una beca de la Entidad Binacional Itaipú.
Orzuza manifestó que al percatarse de estos hechos entraron en pánico, ya que temen por su seguridad debido a los hechos de violencia de que fueron víctimas en los últimos días.
En ese sentido, otro hecho que alertó a los jóvenes fue un rumor de que iban a implantarles drogas, tras esto comunicaron al departamento de Antinarcóticos, quienes llegaron hasta el lugar y no encontraron nada, pero al día siguiente durante la Asamblea un alumno fue acusado por otro de consumir estupefacientes dentro de la Facultad, cosa que quedó descartada por falta de pruebas.
En otros mensajes vía WhatsaApp, uno de los colegas del vicedecano anunció que se debe sanear “todo esto” una vez concluidos los hechos en la Universidad Nacional, una situación que da a entender que los estudiantes podrían sufrir represalias.
Entre otras irregularidades, los alumnos denunciaron que la residencia estudiantil en donde se hospedan varios alumnos del interior del país está en muy mal estado, con el techo dañado. Según las informaciones, los estudiantes fueron obligados por el director a trabajar de guardia en la Facultad porque “viven gratis”.
Estas denuncias fueron hechas al decano y vicedecano de Agronomía, ya el año pasado, pero estos no intervinieron de ninguna manera.
En estos momentos solo 20 alumnos se encuentran custodiando la sede de la Facultad, debido al miedo infundado en los demás. “Ya no sabemos qué hacer porque la Fiscalía no viene”, expresó Orzuza al momento de señalar que están en una zona caracterizada por los fuertes hechos de violencia, “no sé si ellos dimensionan el peligro que corremos”, agregó.
Los universitarios de Central anunciaron que realizarán varias medidas de protesta durante la siguiente semana para apoyar a sus compañeros pedrojuaninos, entre las actividades, declararán como persona no grata al vicedecano, así mismo, también organizan un corte de ruta con apoyo de otras facultades para este lunes y para el martes planifican una gran marcha.