“No es una buena noticia para el sector cárnico en general, en mayor o menor medida afecta a todo al mercado mundial de la carne y es así de lamentable la situación”, afirmó Pauls.
Sin embargo, expresó que al menos temporalmente podría beneficiar al mercado local lo que está sucediendo en el Brasil, ya que los mercados que se cierran en el país vecino podrían ser redireccionados hacia Paraguay, declaró.
Tras el escándalo desatado en Brasil por la adulteración de este producto, Pauls consideró que es una buena oportunidad para exigir que por ley todo ganado nacional sea trazable, sobre todo para ganar confianza y credibilidad de los mercados internacionales.
“Las compañías comercializadoras de carne quieren la identificación para poder ofrecer productos de calidad y en ese sentido Paraguay necesita hacer viable lo más rápido posible el sistema de trazabilidad”, señaló el presidente de la Cámara Paraguaya de la Carne. Sostuvo, además, que el país debe adelantarse a los hechos y exigir la ley que está en estudio en el Ministerio de Agricultura y Ganadería. El gremio insiste y asegura que todo pasa por una decisión política.
Caso. Según publicó la cadena BBC, la llamada Operación Carne Débil reveló que varias empresas adulteraban carne que vendían tanto a nivel local como al extranjero. Cambio de fecha de vencimiento, así como métodos para maquillar el aspecto de la carne, fueron algunas de las prácticas ilegales en las que se habría incurrido, según la investigación de los agentes.
El gigante operativo abarcó siete estados del país y demoró dos años. Además de las prácticas de adulteración del aspecto de la carne, también se señaló la existencia de una red de sobornos en la que estarían implicados decenas de inspectores sanitarios.
Recordemos que JBS exporta carne paraguaya que se procesa en su planta ubicada en Belén, Concepción.