Por Andrés Colmán Gutiérrez
Videos y fotos: Ylda R. Miskinich
SAN IGNACIO, MISIONES
Diez hombres fueron necesarios para mover el enorme cuadro de San Francisco de Asís, de cuatro metros de alto por tres de ancho, hecho con granos de maíz, poroto y locro, desde el interior del Taller de Teatro El Molino, en el centro de la ciudad de San Ignacio donde fue confeccionado, para alzarlo al interior de uno de los enormes camiones de la empresa Serincar y ser trasladado este domingo hasta Ñu Guasu.
La operación fue realizada con mucha delicadeza, debido a la fragilidad de la obra artística, bajo la atenta dirección del artista plástico Koki Ruiz, el creador del concepto y director de un grupo de aproximadamente 20 artesanos, que durante dos meses trabajaron en la confección de las distintas piezas del retablo de maíz, de 40 metros de largo por 14 de alto, que dará el marco imponente a la misa que el papa Francisco celebrará en Ñu Guasu el domingo 12 de julio.
"¡Tengan cuidado...! ¡Que no toque ninguna superficie dura!”, pedía Ricky Corvalán, uno de los principales constructores del Taller El Molino, mientras dirigía a los demás artesanos a colocar varias láminas de espuma para proteger los distintos bordes del cuadro, que además fueron cubiertos por envolturas de plástico.
Posteriormente se realizó el mismo procedimiento con el otro cuadro, de San Ignacio de Loyola, que junto al de San Francisco serán las dos principales imágenes del retablo.
Las distintas columnas y placas, cubiertas de espigas de maíz y frutos de cocotero, también fueron cargadas en los camiones sobre contenedores especiales que los sujetan con mucha firmeza para que no se estropeen durante el viaje, resistiendo a las vibraciones.
El proceso de carga de las piezas del retablo duró casi toda la mañana hasta horas de la siesta y fue acompañado por numerosos pobladores y visitantes que se mantuvieron detrás de una línea de seguridad.
“Los pobladores de San Ignacio y de la compañía Tañarandy están acompañando esta obra con mucha expectativa y sé que se está organizando una caravana para acompañar el traslado de las piezas del retablo hasta Ñu Guasu”, destaca Koki Ruiz.
Bendición por un sacerdote ava guaraní.
La partida de los camiones que trasladarán el altar de maíz desde San Ignacio hasta la capital está prevista para este domingo a las 8.00 de la mañana.
Previamente, habrá una ceremonia en que el sacerdote católico Juan Lino Flores, perteneciente a la etnia Ava Guaraní, que impartirá su bendición con un rito de purificación que une elementos de la cultura indígena con el cristianismo.
“La participación del padre Flores es muy significativa para nosotros, ya que el altar de maíz simboliza justamente esa unión del catolicismo con la cultura de los pueblos guaraníes”, destaca Koki Ruiz.
La expedición será acompañada por efectivos de la Patrulla Caminera y de la Policía Nacional para evitar inconvenientes y se prevén paradas en varios pueblos y ciudades a lo largo de la ruta 1, donde los pobladores sumarán su adhesión a esta obra artística de carácter social.
La llegada a Ñu Guasu estará prevista para aproximadamente las 15.00.
“Trabajaremos en el montaje desde el lunes y estimamos que el armado básico del altar culminará el viernes, pero luego entraremos en la etapa de los detalles. Seguramente hasta muy pocos antes de la misa con el Papa, el domingo 12 de julio, estaremos haciendo retoques para que sea una obra artística religiosa que le guste a la gente”, indica Koki Ruiz.