Estamos en temporada alta de visitas a la que es hoy –con toda justificación– la ciudad veraniega del país. A los que tienen ganas de ir, no se asusten por las odiosas comparaciones que se han hecho últimamente de que “ir al Brasil es más barato” que a Encarnación.
En la Perla del Sur encontrarás opciones para todos los bolsillos. Desde hoteles de tres y hasta cinco estrellas; pero, si vas en grupo, te recomiendo la opción de alquiler de casas.
Eso hicimos con un grupo de familiares y conseguimos una vivienda muy cómoda, a tan solo unas cinco cuadras de la playa que, al repartirnos los gastos, nos salió realmente muy económico.
Si hace tiempo no vas a la capital de Itapúa te sorprenderá la limpieza y el orden de la ciudad; los vehículos se detienen para el cruce del peatón y, salvo los fines de semana, en la playa tendrás suficiente espacio para disfrutar del día.
A diferencia del Brasil, almorzar en un restaurante con vista al río no es costoso; por ejemplo, vas a encontrar opciones de comida rápida –precios exactamente iguales a la capital– y hasta restaurantes con platos tipo gourmet. Todo dependerá de tu presupuesto.
Hay una excelente opción que no te podés perder. Visitar la Reducción Jesuita de Tavarangue que está a solo 38 km de Encarnación. Llevale a tu familia de día y pedí un guía en la entrada que te va a contar la fascinante historia detrás de esta reliquia.
Cuando compres tu ticket, ese mismo boleto te sirve para visitar el espectáculo nocturno de luces y sonidos de las reducciones de Trinidad, es sencillamente espectacular. También podrás visitar las ruinas de San Cosme y Damián.
No te apures, visitalas tranquilo, pues te darán tres días para hacer el circuito. ¿El costo de esto? Apenas G. 15.000 por persona.
Tampoco dejes de pasar por El Dorado. Es un parque acuático fantástico para la diversión de los chicos. Queda apenas a unos 15 kilómetros de Encarnación y podrás pasar el día, ojo, tienen parrilla para hacer el asado. La entrada es G 50.000 para adultos y G 30.000 para los niños.
Por las noches, la ciudad de Encarnación te ofrece todo tipo de opciones para cenar con la familia, están las principales cadenas de comida rápida, como también restaurantes de alta cocina y mi debilidad: muy buenas pizzerías.
Antes de volver hacia tu lugar de partida, dejá reservado por lo menos un día para visitar la cercana ciudad de Carmen del Paraná. La playa es preciosa, el ambiente mucho más tranquilo y es especial para hacer deportes acuáticos.
Viajá con la familia, no es caro como dicen. Te aseguro, el sur del país está ¡muy bueno!