En la operación fueron detenidas 12 personas, de las cuales seis fueron procesadas con prisión, y las autoridades uruguayas se incautaron de alrededor de un millón de cigarrillos ilegales distribuidos en 48.000 cajetillas.
“El monto de esta mercadería se estima que supera el millón de pesos (unos USD 30.770) en el mercado negro”, explicó el Ministerio del Interior en un comunicado.
Los contrabandistas introducían el tabaco a través de la frontera con Brasil en la ciudad uruguaya de Aceguá, ubicada en el departamento (provincia) de Cerro Largo, en el noreste del país.
El objetivo era comercializar la mercancía ilegal en Montevideo, algo de lo que se encargaba un hombre cuyas iniciales corresponden a G.D.C.B., considerado el líder de la organización y que también fue detenido.
Una vez en la capital uruguaya, los cigarrillos de contrabando “eran repartidos por una pareja a diferentes revendedores”, indica el texto.
El director general del Departamento de Información e Inteligencia de la Policía uruguaya, Williams García, señaló que esta organización fue desarticulada en su totalidad, pero los trabajos de investigación continuarán a modo de prevenir que surjan otras similares.