BERLÍN - ALEMANIA
La actitud proteccionista hacia el mercado del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene el potencial de encender una guerra comercial, dijo ayer la Confederación Alemana de Cámaras de Industria y Comercio (DIHK), y advirtió que las empresas germanas están entre los mayores creadores de empleo del país norteamericano.
Alemania teme que sus exportadores se vean perjudicados por la presión de la Casa Blanca para revertir el déficit comercial de Estados Unidos y refrenar a los países que abusan de las normas de mercado.
“Vivimos en un mundo en el que (la posibilidad de) una guerra comercial no puede ser descartada”, dijo Volker Treier, líder de la filial de comercio exterior de la DIHK (por sus siglas en inglés).
CUESTIONAMIENTOS. Se espera que las divisiones acerca del comercio enturbien la cumbre del G20 que organiza la canciller alemana, Angela Merkel, en Hamburgo, esta semana. Al evento también asistirán Trump y el presidente chino, Xi Jinping, cuyo gobierno ha recibido críticas de Washington por las exportaciones baratas de acero del país asiático.
Altos funcionarios estadounidenses han lamentado el déficit de EEUU con Alemania, ya que se ha casi duplicado en los últimos diez años, al pasar desde 28.800 millones de euros en 2006, a 49.000 millones de euros en 2016.
Trump advirtió que impondrá un arancel del 35 por ciento a los autos que el fabricante alemán BMW planea producir en su nueva planta de México para luego exportar al mercado estadounidense.
Merkel dijo que buscaría llegar a un acuerdo con Trump sobre el comercio, pero se mantienen diferencias significativas, en especial en torno a la decisión del Gobierno estadounidense de retirarse del histórico Tratado de París de 2015 destinado a combatir el cambio climático.
DIHK dijo el martes que en su último sondeo un máximo récord del 50 por ciento de las 4.000 firmas que operan en el extranjero citaron los riesgos políticos como principal amenaza a su negocio en los pasados 12 meses.