Noelia Duarte Solís
CIUDAD DEL ESTE
El único cementerio de la capital del Alto Paraná está en el barrio Don Bosco, en un predio de 6 hectáreas donde no hubo una previsión y se tuvo un crecimiento desordenado de nichos y panteones. A esto se suma además de la comercialización irregular de pasillos y otros espacios destinados para que los familiares puedan visitar a sus muertos.
Nery Jara, director general de la Comuna de Ciudad del Este (CDE), dijo que se tiene un predio de 20 hectáreas en el km 12 Monday, donde funcionaba el antiguo vertedero, pero que los vecinos del sector se opusieron al proyecto de construir un camposanto en el sitio. “El rechazo fue unánime, ya tenemos un vertedero en la zona, ahora nos quieren traer el cementerio y no aceptamos”, fue el reclamo de los pobladores del sector, según detalló el funcionario.
Ciudad del Este cuenta con cementerio municipal, Presidente Franco tiene 2 municipales y uno privado, en Hernandarias también hay 2 (municipal y privado) y en Minga Guazú existen dos camposantos públicos y uno privado. La mayoría de los cementerios públicos están repletos y eso permitió que empresarios lancen paquetes promocionales para adquirir terrenos en los camposantos privados. “Hasta podemos saber cuánto nos va a costar morir, el precio del ataúd, el inmueble, el salón velatorio, todo eso incluye en un pago que el interesado puede ir haciendo si así lo considera”, expresó Nery Jara.
ESTADÍSTICAS. De acuerdo a los datos de la Municipalidad de CDE, cada mes se producen 70 a 80 inhumaciones en el cementerio del barrio Don Bosco y con un cotejo con la Secretaría de Acción Social de la Comuna, refieren que el 50% de los casos son por accidentes en moto.
Hace una década, la Comuna registraba 40 a 45 entierros al mes, en Ciudad del Este, pero la cifra creció considerablemente y ya no se cuenta con espacio físico para el efecto. Ahora, están construyendo en la última parte del terreno, nuevos columbarios, con capacidad para al menos 200 lugares, que con las estadísticas que manejan en la Municipalidad, sería para paliar por 60 a 90 días el inconveniente.
“Es una cuestión cultural, la gente quiere que sus muertos estén bajo tierra, construirle enormes panteones, pero ya no se tienen condiciones”, reveló el funcionario. La Comuna también distribuye ataúdes a las personas de escasos recursos.
Al respecto se supo que mensualmente entregan 12 a 15 cajones fúnebres, pero cada caso es diferente, pues algunos quedaron sin recursos económicos luego de estar mucho tiempo en los hospitales, y otras causales.