Las conclusiones del estudio, que elaboraron científicos de la agencia ejecutiva del Departamento de Salud británico (PHE, por su sigla en inglés), las adelanta hoy la web de la revista Emerging Infectious Diseases, de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU., antes de su publicación en mayo.
La investigación probó que un hombre británico de 68 años, contagiado de zika a su regreso de las Islas Cook en 2014, mostró restos del virus en el semen (no en la sangre ni la orina) tanto al día 27 de detectarse el contagio como en el 62.