EFE
La línea amarilla, con 3,88 kilómetros de largo, 169 cabinas, 31 torres y cuatro estaciones, unirá el barrio de Ciudad Satélite, en la vecina urbe de El Alto, con la zona de Obrajes de la capital paceña.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, inspeccionó este lunes los avances de esta segunda línea y anunció que comenzará a operar el próximo 10 de septiembre.
Morales destacó la “impresionante” vista desde las cabinas y afirmó que para él “es como viajar en avión”.
Además, recordó que se está planificando una segunda fase del proyecto en la que se prevé añadir cinco nuevas líneas a las tres inicialmente previstas.
Una vez en marcha esas tres primeras líneas, la red del teleférico sumará 10 kilómetros, once estaciones y 443 cabinas con capacidad para 10 personas que podrán transportar hasta 3.000 pasajeros por hora y sentido, y que conectarán El Alto con la residencial zona Sur de La Paz.
Unas 440.000 personas se desplazan a diario entre La Paz y El Alto, que hasta ahora estaban unidas por la única autopista del país, un punto habitual de bloqueo cuando se producen protestas callejeras.
La primera de las líneas inauguradas fue, en mayo pasado, la roja, que une los centros de las dos urbes en aproximadamente diez minutos.
La infraestructura, cuyas obras se iniciaron hace poco más de un año, ha sido construida por la empresa austríaca Doppelmayr y ha costado 235 millones de dólares, sufragados por el Gobierno boliviano.