Las condiciones por las cuales López Rivera, de 74 años, pueda ser liberado de una prisión en el estado de Indiana tras pasar 35 años, son porque ya cuenta con una dirección residencial y puesto de trabajo, según adelantó López Ramos en una rueda de prensa.
López Ramos sostuvo que su padre viviría con ella en su residencia en la capital puertorriqueña y que trabajaría como gestor comunitario en el Municipio de San Juan, bajo la Administración de la alcaldesa Carmen Yulín Cruz Soto, una de las promotoras por la excarcelación de López Rivera.