Anoche tuvo una tarea sobria a pesar de los tres goles en los que no tuvo absolutamente nada que hacer.
En el primer gol, el disparo fue muy esquinado de Coutinho; en el segundo el remate de Neymar se desvió en Riveros y en el tercero, quedó fuera de acción con la rápida definición de Marcelo.
Sin embargo, generó uno de los pocos festejos de los aficionados, cuando paró muy bien el penal ejecutado por Neymar, el astro brasileño. Antony extendió su 1.90 m de estatura para sacar la pelota de la esquina en fantástica reacción.
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