La Bienal, que se realiza hace tres años en distintos lugares de la capital uruguaya, esta vez estará alojada en el Salón de los Pasos Perdidos del Palacio Legislativo, edificio sede de las cámaras legislativas de Uruguay, y tendrá como lema “El Espejo Enterrado”, en relación a la obra del escritor e intelectual mexicano Carlos Fuentes.
La cocuradora del acontecimiento artístico, Jacqueline Lacasa, explicó que, “desde el punto de vista curatorial”, se trabajó “lo que tiene que ver en el imaginario social y colectivo el lugar que ocupa el Palacio Legislativo como emblema de la institucionalidad, de la democracia y de la propia historia y memoria” uruguaya.
Asimismo, comentó que el grupo de 38 artistas está integrado por creadores de países como China, Brasil, Canadá, Argentina y Uruguay.
En concreto, Lacasa destacó que dentro de los propósitos de esta bienal se encuentra “acercar el arte a muchos lugares, que circule la obra y el trabajo de los artistas”, así como “que puedan ser conocidos en otros espacios”.
Una de las artistas uruguayas que expondrá en la Bienal, Julia Castagno, señaló a Efe que el Palacio Legislativo, como lugar, “es un símbolo de la democracia”.
Además, mencionó que su obra, que se titula “El Fractal de Delacroix”, está inspirada en el pintor francés Eugène Delacroix y en las cartas escritas por Vincent Van Gogh a su hermano sobre el trabajo del francés.
Su muestra consiste en figuras con forma de tetraedro que irán colgadas en una de las esquinas del Salón de los Pasos Perdidos, quizás el espacio más emblemático del recinto legislativo.
Por su parte, otro de los artistas nacionales que expondrá en la Bienal, Diego Masi, explicó a Efe que “Flashlight”, como se llama su muestra, consiste en una “instalación sonora y lumínica”, que está compuesta por 100 baldes de trabajo a los que se les incorporó un sistema de flash que interactuará con los visitantes.
Asimismo, Masi explicó que Flashlight “estará instalada en el acceso a la Cámara de Senadores y en el de la Cámara de Diputados”, en busca de generar un “nexo” con la política, el arte, la luz, la arquitectura, es decir, “vincular lo que es el peso simbólico” del edificio y lo que representan “las puertas de acceso a las cámaras”.
La Bienal se inaugurará al público el 29 de septiembre y se mantendrá hasta el 4 de diciembre, época en la que el Parlamento permanecerá abierto para el disfrute de los visitantes.
En este sentido, Lacasa explicó que contarán con seis personas que se encargarán de la acción educativa de la Bienal, para “acercar al público a la propuesta”, así como “compartir ideas, consultas y expectativas”.
