“Creo que las medidas (de ajuste) son el camino: es necesario producir más, invertir y, digamos, gastar menos en cosas que no sean esenciales”, afirmó Machete a periodistas tras un almuerzo con empresarios portugueses y brasileños en la Cámara Portuguesa de Negocios en Sao Paulo.
En el tercero de sus cuatro días de visita a Brasil, Machete respaldó el principal objetivo de este año de Rousseff y su ministro de Hacienda, Joaquim Levy, en materia económica, que es el de lograr un ajuste para conseguir un superávit primario del 1,2 % del Producto Interior Bruto (PIB).
Una parte de las medidas todavía debe ser aprobada por el Congreso.
En declaraciones a Efe, el ministro afirmó que la perspectiva de caída de la economía brasileña “puede ser minimizada”.
“Esto depende de las medidas adoptadas, de la evolución del mercado mundial, de la suerte y la voluntad de los brasileños. Confiamos en que Brasil tendrá capacidad”, sostuvo Machete.
Durante su discurso a empresarios en Sao Paulo, Machete dijo que Portugal “ha dejado atrás la recesión” y se muestra como un atractivo para los inversores de Brasil, país que se encuentra con perspectivas en 2015, de una caída en su economía próxima al 1,0 %.
“Existe un amplio margen para que el volumen de inversiones brasileñas en Portugal puedan aumentar aún más”, resaltó el ministro.
Según Machete, Portugal, que tiene a Brasil como su principal socio en América Latina, se transformó en una oportunidad para empresas brasileñas tras haber concluido “con éxito en mayo del año pasado, el programa de ajuste al se sujetó tras la crisis económica que afectó a Europa en los últimos años”.
“Portugal corrigió los desequilibrios estructurales en la economía y actualmente está en el camino del crecimiento económico sustentable, dejando atrás el período de recesión”, sostuvo Machete, citando perspectivas de aumento del Producto Interno Bruto de 1,5 % este año.
Así, el canciller afirmó que los empresarios brasileños se encuentran, en 2015, en segundo lugar en autorizaciones concedidas para invertir en Portugal, con un total de 81 hasta marzo pasado y destacó el desembarque con fuerza de empresas como la de aeronáutica Embraer, el grupo Intercemento-Camargo Correa, Globo y O Boticario.
“Tenemos en el turismo -completó- un excelente ejemplo del camino que puede ser recorrido: Brasil es actualmente el sexto mayor emisor de turistas hacia Portugal y el primero fuera de Europa”.
Pero, para Portugal, el mercado de 200 millones de personas de Brasil es una clave para las exportaciones.
Brasil es el tercer mayor mercado de destino fuera de la Unión Europea, detrás de Estados Unidos y Angola y el primero en América Latina.
“El número de empresas portuguesas que exportan a Brasil creció en forma significativa, de 1.100 en 2009 a 1.740 en 2013", subrayó Machete, al saludar la creación de un nuevo foro de negocios en Sao Paulo destinado a atraer pequeñas y medianas empresas portuguesas a la metrópoli brasileña.
Antes del encuentro con empresarios, el canciller Machete visitó el Museo de la Lengua Portuguesa en Sao Paulo donde destacó que detrás del inglés y el español, la lengua de Camoes es la que más gana relevancia en el mundo de los negocios emergentes gracias a países como Brasil, Angola y Mozambique.
“Tenemos diferenciación en la lengua portuguesa: geopolíticamente estamos presentes en cuatro espacios, como Europa, América, Africa y Asia”, subrayó.
El ministro destacó que el portugués es la quinta lengua más hablada en el mundo (unos 254 millones de personas, un 3,7 % de la población mundial), la quinta más usada en internet con 122 millones de usuarios, la tercera en Facebook y la cuarta en Twitter.
De igual manera, el ministro defendió el intercambio científico y académico para el desarrollo de los miembros de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (Portugal, Brasil, Angola, Mozambique, Guinea Bissau, Timor Oriental, Santo Tomé y Príncipe, Cabo Verde y Guinea Ecuatorial).
El ministro terminará mañana en Sao Paulo su visita a Brasil, después de pasar por Brasilia y Río de Janeiro.