Al parafrasear a Charles Dickens en su fantástica construcción de la oración: “Era el mejor de los tiempos y era el peor de los tiempos...” (Historia de dos ciudades), solo apunto a remarcar las dos posturas bien definidas y radicalizadas entre las que se debaten los estudiantes y toda la estructura académica universitaria ante la ratificación de intervención de la UNA por parte del Consejo Nacional de Educación Superior (Cones).
Considero que esa intervención es más que necesaria y la decisión de las autoridades de la Universidad Nacional de Asunción de accionar contra ella (por supuesta inconstitucionalidad) no es sino una prueba contundente de lo mucho que la temen y de cuánto hay por ocultar aún en el manejo de la institución.
Las autoridades del Cones han dado garantías suficientes de que respetarán la autonomía universitaria (de hecho, esa garantía la está dada por la misma ley).
Por lo que la ciega resistencia a su intervención no puede entenderse sino como temor.
Sí, miedo a que personas independientes a intereses políticos partidarios vean cómo se han manejado desde siempre en y desde la universidad pública.
El arquitecto Meyer, actual rector de la UNA, pese a su inteligente manejo con los estudiantes y los decanos y vice, que aún no renunciaron, no puede ocultar que ha sido igualmente responsable en todo lo acontecido en la universidad en todo este tiempo.
Y más allá de que siga o no haciendo campaña por su candidatura a la intendencia de Asunción (de hecho, no la necesita y se está ahorrando un montón de dinero con la promoción gratuita que le hacemos todos los medios de comunicación en sus diferentes plataformas), lo que debemos entender todos aquí es que autonomía no implica que la UNA y sus autoridades hagan lo que se les cante con los bienes del Estado (como lo han hecho y lo siguen haciendo hasta ahora).
De manera que si este será el mejor de los tiempos o el peor de los tiempos dependerá exclusivamente de que se permita o no la intervención del Cones.
Si de algo sirve mi voto es porque el Cones intervenga urgentemente y normalice lo antes posible la vida académica en la UNA. Los alumnos deben volver clases.
