18 abr. 2024

El humor absurdo de Andersson y el terror de Tsukamoto cautivan en la Mostra

Venecia (Italia), 2 sep (EFE).- Del humor absurdo y el esteticismo pictórico del sueco Roy Andersson a la brutalidad sobrecogedora del japonés Shinya Tsukamoto en su drama bélico “Nobi”, hoy ha sido una jornada de rarezas en la Mostra de Venecia. Eso sí, rarezas que han suscitado encendidos aplausos.

El director sueco Roy Andersson (c) posa junto a los actores Nils Westblom (i) y Holger Andersson (d) durante el pase gráfico de la película "Una paloma posada en una rama reflexionando sobre la existencia",en la 71 edición del Festival de Cine Internacio

El director sueco Roy Andersson (c) posa junto a los actores Nils Westblom (i) y Holger Andersson (d) durante el pase gráfico de la película “Una paloma posada en una rama reflexionando sobre la existencia”,en la 71 edición del Festival de Cine Internacio

El siempre agudo e irónico Andersson ha presentado “A Pigeon Sat on a Branch Reflecting on Existence”, una peculiar reivindicación de la empatía humana con la que cierra su trilogía existencial. O no. “Estoy preparando ya la cuarta entrega de la trilogía”, bromeó hoy ante los periodistas.

Después de “Songs from the Second Floor” y “You the Living”, Andersson renuncia por completo al tradicional esquema de planteamiento-nudo-desenlace y opta por una sucesión de 39 escenas cotidianas primorosamente compuestas, con la cámara fija y el plano abierto.

A ritmo de vals, los personajes se desenvuelven con extremada lentitud e hieratismo, como un ballet tragicómico. Un hombre muere descorchando una botella de vino, otros dos intentan dar un pelotazo vendiendo sacos de la risa.

El director recurre al humor para hacer reflexionar al espectador sobre lo absurdo de nuestra existencia, y lo coge desprevenido cuando repentinamente se pone más dramático. En uno y otro caso, el ser humano queda a la altura del betún.

“Odio la estupidez humana, que es el resultado de la falta de conocimiento y de empatía. Pero amo la vida y a las personas”, aseguró Andersson en rueda de prensa.

Es la primera vez que filma en digital, lo que le ha dado un brillo y precisión muy acorde con su búsqueda estética inspirada en pintores alemanes de entreguerras como Otto Dix y Georg Scholz y en el renacentista Brueghel.

“No quiero contar historias sino hacer cuadros de la vida”, explicó. “Hay una falta de calidad visual en el cine actualmente. Me gustaría que hubiera más, pero desgraciadamente falta tiempo, paciencia y dinero”.

Él desde luego le ha echado mucho de lo primero. Ha tardado cuatro años en rodar. Un mes por toma. A veces más.

En las antípodas estilísticas y llevando el tema de la estupidez a las cotas más altas posibles, el japonés Shinya Tsukamoto aparca el género fantástico que le ha valido la etiqueta de realizador de culto (“Tetsuo, el hombre de hierro”), para pasarse al drama bélico.

Aunque por momentos “Nobi” parece una película de terror. Ambientada en los estertores de la Segunda Guerra Mundial, muestra a un grupo de soldados japoneses perdidos en la selva en Filipinas.

Las balas que caen en ráfagas de origen desconocido, los cadáveres por todas partes, el encierro y la desesperación llevan a los últimos supervivientes a descubrir hasta dónde es capaz de llegar el ser humano con su instinto de supervivencia.

“La guerra siempre es algo excesivo hasta el punto de que el cuerpo humano acaba convirtiéndose en un objeto”, señaló en Venecia Tsukamoto, también productor, guionista y protagonista del filme.

“Me interesaba describir la tragedia bélica no desde el punto de vista de la víctima, sino del superviviente que tiene que cargar con el peso de las matanzas”, ha añadido el realizador.

Para documentarse, Tsukamoto realizó hace ya una década una serie de entrevistas con veteranos japoneses. “Han sufrido un dolor para nosotros inconcebible”, detalló.

Su motivación para rodar “Nobi”, según ha explicado, es que habiendo pasado 70 años desde que Japón tomó partido en el conflicto armado, le preocupaba que se olvidara lo devastador y absurdo que fue.

“El terror de la guerra no es algo que puedas borrar de la Historia y yo quería recordarlo”, señaló.

Para rematar la jornada de rarezas hoy se proyectó también en la Mostra, fuera de competición, el último trabajo de Manoel de Oliveira, el cortometraje “O Velho do Restelo”.

A sus 105 años, el realizador portugués vuelve a reflexionar sobre la historia de la Península Ibérica a través de los textos de Luís de Camões y Miguel de Cervantes.

Magdalena Tsanis

Más contenido de esta sección
Estudiantes y docentes de la Universidad de Buenos Aires (UBA) protestan con clases públicas en la calle y abrazos simbólicos a edificios, en repudio al drástico ajuste del gobierno de Javier Milei, que puede provocar el cierre de la institución en dos o tres meses, alertaron sus autoridades el jueves.
El análisis por parte de aficionados, con la posterior supervisión de científicos, de 37000 fotografías tomadas durante 19 años por el telescopio Hubble –de la NASA y la Agencia Espacial Europea (AEE)–, ha permitido catalogar 1031 asteroides pequeños que habían pasado desapercibidos.
La protección de los datos del cerebro humano comenzó a operar esta semana en el estado de Colorado, gracias a una nueva ley, la primera en Estados Unidos, que protege esta valiosa información privada.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció este jueves que la propagación de la variante H5N1 del virus de la gripe aviar a especies más allá de las aves, incluidos mamíferos y humanos, es inquietante y hay que vigilar de cerca esta evolución.
La inflación en Argentina “está bajando un poco más rápido de lo previsto inicialmente”, afirmó este jueves la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.
La empresa Google despidió este jueves a 28 empleados que se acercaron al presidente de la firma, Thomas Kurian, para demostrar su rechazo al “genocidio” en Gaza y a un contrato del gigante tecnológico con el Gobierno de Israel.