EFE. El jefe de Gobierno tomó esa decisión de forma temporal y ordenó devolver la cinta “Halauat Ruh” (La dulzura de Ruh) al departamento encargado de la censura y dependiente del Ministerio de Cultura para que se pronuncie definitivamente sobre la película.
Con solo dos semanas de proyección, la película, del director egipcio Sameh Abdelaziz, se ha convertido en un éxito de taquilla en el país, con multitud de opiniones tanto a favor como en contra de ella en las redes sociales.
Frente a quienes denuncian que se trata de una película pornográfica, la misma Wahbe respondió en su cuenta de Twitter que “los que critican la película no la han visto ni conocen su historia”.
“Halauat Ruh” cuenta la historia de una mujer que vive en El Cairo con su hijo y, con su marido en el extranjero por trabajo, decide ganar dinero cantando en una discoteca de una popular avenida de la capital, donde sufre una serie de problemas.
Las películas de cierto contenido erótico o religioso son examinadas con lupa por la censura en Egipto, que al igual que otros países árabes suele prohibir aquellos proyectos que considera que atentan contra la moral pública.
