La denominada madrina de la política de Canindeyú, la diputada y ex gobernadora, María Cristina Villalba (ANR), acusada de ser la protectora del intendente de Ypejhú, Vilmar Neneco Acosta Marqués, tiene un plan B para el caso de tener que abandonar el escaño que ocupa en la Cámara Baja por las presiones políticas que acorralan a su partido. Es que el curul legislativo quedaría en manos de su familia, ya que la mujer tiene como suplente a nada menos que su esposo, Félix Antonio Abente Cabañas, quien estuvo involucrado años atrás en el crimen de una persona.
Abente trabajó también en Itaipú como consultor y tiene habilidad en el comercio bionacional.
El caso en el que se lo involucró a Abente Cabañas ocurrió en el 2005, en Brítez Cué, donde tras una discusión con el albañil Ramón Concepción Villamayor de 43 años, el esposo de Villalba desenfundó un revólver calibre 38 y disparó a quemarropas contra el albañil, quien perdió la vida dejando huérfanos a seis niños.
Abente estuvo un tiempo en la cárcel regional de Coronel Oviedo, pero finalmente fue sobreseído del caso que llevó la carátula de homicidio culposo y no doloso, a pesar de los numerosos testigos que le vieron disparar a quemarropa al albañil.
Madrina. Cristina Villalba fue calificada como madrina política de la zona y protectora del intendente Acosta Marqués, quien está prófugo y fue imputado por procesamiento, recolección y fabricación de estupefacientes.
Acosta, junto a su hermano Wilson y su sobrino Gustavo Acosta Gadea, son además sindicados como sospechosos del asesinato del periodista Pablo Medina y su asistente Antonia Almada, el pasado 16 de octubre, en la zona de Ypejhú, de Canindeyú.
Todos estos vínculos con los denominados narcopolíticos ponen a la diputada Villalba en el ojo de la tormenta, quedando expuesta a una posible imputación, debido a los vínculos con los Acosta, hecho de los cuales la legisladora no pudo desprenderse.
Así, quien fuera líder de bancada de su partido a principios del presente mandato, hoy está perdiendo apoyo a tal punto que la propia titular de la ANR, Lilian Samaniego, le recomendó ponerse a disposición de la Justicia para que aclare su situación.
Incluso sobre el acto de apoyo a Villalba que hicieron días atrás intendentes de Canindeyú y el gobernador de la zona, Alfonso Noria Duarte, Samaniego manifestó que “no hay que mezclar el Partido Colorado en todo esto”.
El propio titular de la Cámara Baja, Hugo Velázquez, mencionó que están abiertos a cualquier pedido de parte de la Justicia, para aclarar el tema.
Otros sectores fueron más directos, como los diputados de la bancada B de la ANR, que responden al liderazgo del líder del Alto Paraná, Javier Zacarías Irún, quienes recomendaron a Villalba que pida su desafuero para aclarar su situación.
Esto obligó a la legisladora a poner, en la última sesión de Diputados realizada el jueves pasado, a disposición de la Justicia sus fueros parlamentarios. Dijo que está dispuesta a colaborar cuando la investigación del caso lo requiera. Si es así, deberá dejar su banca y le suplirá su esposo.
