Poco más de un año después de llegar al poder tras la suspensión de su ex compañera de fórmula Dilma Rousseff, el mandato de Michel Temer se tambalea por acusaciones de corrupción.
El presidente logró una importante victoria el viernes cuando la corte electoral rehusó invalidar las elecciones de 2014 –donde venció la fórmula Rousseff-Temer–, después de examinar si la campaña se había beneficiado de abusos de poder y de financiación ilegal procedente del megafraude a Petrobras. Aunque esa apenas fue una batalla dentro de la feroz lucha de poderes que sacude al mayor país de América Latina. Y parece que la semana traerá más turbulencias. “Brasil está en un vale tudo institucional”, afirma Mauricio Santoro, politólogo de la Universidad del Estado de Río de Janeiro, recurriendo a la denominación de una modalidad brutal de lucha nacida en el país, precursora de las famosas MMA (artes marciales mixtas).
Mucho contacto y pocas reglas: Bienvenidos a la política brasileña.