Siete países votaron a favor de la iniciativa, impulsada por Estados Unidos, pero otros ocho se abstuvieron, por lo que la resolución no obtuvo el mínimo de apoyos necesarios para ser aprobada.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, había pedido esta misma semana al Consejo de Seguridad que adoptase el embargo de armas como una forma de limitar los daños en el conflicto que vive Sudán del Sur.
“Sudán del Sur no se enfrenta a ninguna amenaza externa. Más armas solo aumentarán el peligro para su propia gente”, defendió entonces Ban, reiterando un llamamiento que lleva haciendo desde que la tensión resurgió hace meses en el país africano.
La embajadora estadounidense, Samantha Power, lamentó hoy el fracaso de su proyecto de resolución e insistió en que el embargo de armas ayudaría a la situación.
Power advirtió a quienes se oponen a la medida de los grandes riesgos de abusos contra la población que hay en el país africano y dijo que el flujo de armas mantiene “la ilusión” de algunos de que es posible poner fin al conflicto por la vía militar.
EE.UU. recibió el respaldo de sus principales aliados en el Consejo de Seguridad, pero se encontró con la abstención de otros países como China, Rusia, Japón y varios africanos, que hizo imposible sacar la iniciativa adelante.
El borrador propuesto por Washington incluía también sanciones para varios líderes sursudaneses considerados responsables de la violencia.
En los últimos días, Naciones Unidas ha reiterado que existe un riesgo claro de que se cometa un genocidio en el país.
Ban dijo esta semana que los informes apuntan a que el presidente sursudanés, Salva Kiir, y sus aliados preparan una ofensiva militar en los próximos días contra sus enemigos, mientras que el líder opositor Riek Machar y otros buscan una escalada militar.
Independizado de Sudán en 2011, Sudán del Sur se halla sumido en la violencia desde que en diciembre de 2013 Kiir denunció un intento de golpe de Estado encabezado por su rival Machar.
Aunque ambos alcanzaron un acuerdo de paz en agosto de 2015, la tensión volvió a estallar hace unos meses.
