Los quince Estados miembros, en un comunicado pactado por todos ellos, expresaron su preocupación por el “comportamiento altamente desestabilizador” del gobierno norcoreano y su “flagrante y provocador desafío” al Consejo de Seguridad, que prohibió al país este tipo de ensayos militares.
El máximo órgano de decisión de Naciones Unidas recordó que el lanzamiento de este último misil se produce menos de tres semanas después del anterior y sigue a varias pruebas más en lo que va de año.
“Los miembros del Consejo de Seguridad deploran todas las actividades con misiles balísticos de la República Popular Democrática de Corea, incluido este lanzamiento”, señalaron en su nota.
Una vez más, los quince países exigieron al régimen norcoreano que abandone inmediatamente este tipo de acciones, que violan las resoluciones aprobadas por el órgano y que contribuyen al desarrollo de sus sistemas para transportar armas atómicas.
Como hace habitualmente, el Consejo de Seguridad expresó hoy su disposición a adoptar “nuevas medidas significativas” en respuesta a las acciones de Corea del Norte, utilizando el lenguaje diplomático con el que el órgano se refiere a posibles sanciones.
La ONU tiene ya en vigor importantes castigos contra el régimen de Kim Jong-un por su programa nuclear y sus repetidos desafíos armamentísticos.
Corea del Norte disparó su último misil de medio alcance en vísperas de las reuniones que desde hoy celebran en Florida los presidentes de EE.UU., Donald Trump, y de China, Xi Jinping, en la que se espera que la cuestión norcoreana sea un asunto central.
Ayer, el Gobierno chino volvió a pedir prudencia a todas las partes, sin condenar directamente la última prueba dirigida por Pyongyang, y descartó que la acción guarde “relación directa” con el primer cara a cara entre Xi y Trump.
Por su parte, el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, se refirió al lanzamiento de este misil en un breve comunicado en el que se limitó a señalar que su país ha “hablado lo suficiente sobre Corea del Norte”.
“Corea del Norte ha lanzado otro misil balístico de alcance medio. Estados Unidos ha hablado lo suficiente sobre Corea del Norte. No tenemos más comentarios”, aseguró secamente Tillerson en su comunicado.
Un alto funcionario de la Casa Blanca adelantó esta semana que en su encuentro con Xi, Trump le advertirá de que “se ha agotado el tiempo” para ser pacientes con Corea del Norte, y que Estados Unidos tiene ahora “todas las opciones sobre la mesa” para presionar a Pyongyang, con o sin el apoyo de chino.
