La tasa de referencia monetaria se mantuvo en 6% desde enero pasado y esta es la primera vez en cuatro meses que se ajusta a la baja, de acuerdo con especificaciones de la institución.
El Ceoma señala que, tal como se había proyectado, los indicadores más recientes que miden la tendencia de la inflación siguen desacelerándose en el margen. Si bien, en forma agregada, la actividad económica continúa con un moderado ritmo de expansión, ciertos sectores se han ralentizado, tal como se destaca en el comunicado.
En este contexto, el comité considera que el actual escenario económico interno y externo generó una modificación del balance de riesgos tal que posibilita adoptar de manera oportuna un perfil de política monetaria más expansivo.
El BCP baja la tasa de interés de política monetaria para que los bancos depositen menos dinero en la banca matriz. Esto permitirá que haya más liquidez para prestar a los clientes con miras a dinamizar la actividad económica.
El comité reafirma que utilizará sus instrumentos con flexibilidad, a fin de garantizar la convergencia de la inflación proyectada a la meta de 4,5%.
otro escenario. Cuando se había elevado la tasa de política monetaria en enero pasado, el comité consideró en esa oportunidad que con el panorama económico de ese entonces y el previsto obligaba a adoptar de manera oportuna un perfil de política monetaria menos expansivo como estrategia más apropiada, de modo de evitar un deterioro de las expectativas de inflación, y así garantizar que la inflación proyectada converja con la meta de 4,5% anual en el horizonte de política.
Por otra parte, si bien la actividad económica continuó a comienzos de año mostrando un menor ritmo de expansión, el Ceoma destacó que la función primaria de la política monetaria es el control de la inflación.
Recordemos que hace exactamente un año, en mayo del 2015, la tasa se ubicó en 6,25%, es decir, medio punto porcentual hacia arriba de lo que ahora constituye el ratio citado.