La renovación en nuestro fútbol también alcanzó al arbitraje y la transición parece que será dolorosa, similar a lo que sucede con la Selección Absoluta.
Con la promoción de nuevos árbitros y la poca participación de los experimentados –Carlos Amarilla, Antonio Arias y Ulises Mereles, entre otros–, se pensó que iba a mejorar la situación.
Buscando mayor capacitación para los nuevos, se sumó el muy aceptado Carlos Torres, pero ni su presencia pudo evitar que las quejas al menos disminuyeran.
etapa crítica. Una nueva cabeza en la Asociación Paraguaya de Fútbol sirvió para que haya cierta tregua, pero al pasar la sexta fecha, con Libertad sacando ventaja en la tabla de puntuaciones y otros hundiéndose en la de promedios, comenzaron los reproches contra el arbitraje.
En algunas ocasiones, con mucha razón, y en otras, tratando de justificar las derrotas. La 6ª y la 12ª fueron las fechas donde se produjeron más expulsados (siete en cada una de ellas). El miércoles podría definirse el futuro de Carlos Torres. Este no comparte el sorteo de árbitros.