Una condición para sentarse a hablar de una posible alianza o concertación, sigue siendo que se respete la postura partidaria que mediante su convención ha dicho no a la reelección vía enmienda, recalcó Alegre. “Debe haber un acuerdo amplio sobre la base del rechazo a la enmienda y el respeto a lo dispuesto en la convención. Por eso creo importante que el gobernador Lanzoni primero logre un pronunciamiento de los senadores, porque luego sus senadores le desautorizan”, refirió.
Mencionó que un fenómeno parecido se da en filas del Frente Guasu, donde Lugo ejerce el liderazgo, pero su rechazo a la enmienda no es un imperativo para los demás senadores. “Lo mismo es el caso de Lugo, quien dice que se murió la enmienda, pero sus senadores salen y dicen que el proyecto sigue”, significó.
De este modo, la posibilidad de unidad y de integrar la mesa de los presidenciables de la oposición es muy difícil, ya que para Efraín se observa de momento que ni Lanzoni ni Lugo ofrecen las garantías de sus respectivos equipos políticos.
Pidió seriedad y por sobre todo “claridad” a los líderes y aconsejó a que trabajen mejor este tema para que no quede ninguna sombra de duda sobre sus intenciones.
“Seamos más serios porque los paraguayos exigen eso. No pueden salir a decir estamos en contra y sus senadores dicen que trabajan intensamente para habilitar la reelección”, dijo.