En un comunicado, el Departamento de Estado precisó que los afectados por la medida son El Shafee Elsheikh, Anjem Choudary, Sami Bouras, Shane Dominic Crawford y Mark John Taylor.
Las autoridades estadounidenses advirtieron de que esos individuos “han cometido o suponen un significativo riesgo de cometer actos de terrorismo”, por lo que decretaron el bloqueo de los activos que puedan poseer bajo jurisdicción estadounidense.
Asimismo, el Gobierno norteamericano prohibió a los ciudadanos de este país implicarse en transacciones financieras con los cinco presuntos terroristas.
El Shafee Elsheikh viajó a Siria en 2012, se unió a la filial local de Al Qaeda y después se integró en el EI, donde fue identificado en 2016 como un miembro de la célula conocida como “The Beatles”, acusada de “decapitar a más de 27 rehenes y torturar a muchos más”, según el comunicado.
Algunos de los rehenes del grupo que fueron liberados revelaron que sus secuestradores hablaban con acento británico y le pusieron el apodo de “The Beatles”, en alusión al mítico conjunto musical de la ciudad inglesa de Liverpool.
Anjem Choudary es un “extremista británico con vínculos con redes terroristas y extremistas en el Reino Unido” que en 2016 fue condenado a prisión por jurar lealtad al EI y reclutar miembros para esa organización yihadista.
Sami Bouras, por su parte, es un ciudadano sueco de origen tunecino que es “miembro de Al Qaeda” y ha estado implicado en la “planificación de ataques suicidas”.
En cuanto a Shane Dominic Crawford, el Departamento de Estado afirmó que es oriundo de Trinidad y Tobago y se cree que actualmente actúa como un “terrorista extranjero en Siria” involucrado en actividades del EI, incluida la propaganda en inglés del grupo.
Por último, Mark John Taylor es un ciudadano neozelandés que ha combatido con el EI en Siria desde 2014 y ha utilizado las redes sociales para promover ataques terroristas en Australia y Nueva Zelanda.
