28 mar. 2024

Edificio donado a Fiuna peligra

El predio que la Gobernación de Misiones donó recientemente a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (Fiuna) corre riesgo de terminar como un elefante blanco: Una obra costosa sin ser bien aprovechada.

Desfasaje.  Mientras la demanda de ingenieros crece,  la inversión del Estado en  la UNA baja.

Desfasaje. Mientras la demanda de ingenieros crece, la inversión del Estado en la UNA baja.

Esto puede ocurrir en caso de que no se apruebe en el Congreso el pedido de ampliación presupuestaria presentado por la UNA. En el documento se contempla una inversión de G. 1.000 millones para equipar el edificio, cuya primera etapa costó G. 2.300 millones que corrió por cuenta de la Gobernación.

El monto previsto, específicamente, servirá para montar una biblioteca, equipar una sala informática y mudar las oficinas administrativas de esa filial que se encuentran en un edificio prestado por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) y donde se dan clases a estudiantes de primeros semestres.

Migración. En su sede de Ayolas, habilitada en 2015, la Fiuna solo está en condiciones de impartir hasta el cuarto semestre (2º curso). Por lo que, quienes cursan el quinto semestre tienen que migrar forzosamente a la sede central, en el campus de San Lorenzo, porque empiezan a desarrollar clases en laboratorios con costosos equipos, cuya instalación y mantenimiento rondan los G. 20.000 millones anuales, según el Ing. Pedro Ferreira, decano de esa institución.

Prevén –por eso– la compra de un ómnibus para trasladar a los alumnos del quinto, una vez por semana al campus, para las prácticas laboratoriales. Todo esto, en caso de aprobarse la referida ampliación que permitirá llevar a cabo esa mínima inversión en mobiliarios y equipamientos. “Es más barato comprar el bus que montar un laboratorio allá (en Ayolas)”, apuntó. Caso contrario, la migración de quienes avanzan en la carrera será absoluta.