El agente de la Policía Nacional fue secuestrado por el grupo armado el 5 de julio del año pasado en la zona de Arroyito, departamento de Concepción, cuando se encontraba de cacería con un grupo de amigos.
Los miembros del EPP pidieron en octubre pasado que 6 de sus integrantes presos fueran puestos en libertad a cambio de la libertad de Edelio, pero el Gobierno dejó en claro en varias oportunidades que el pedido es innegociable.
La última prueba de vida la dio el joven Arlan Fick tras ser liberado por el grupo armado en el mes de diciembre. Este mencionó que hasta el día 22 de ese mes estaban juntos y posteriormente fueron separados.
El vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta, Víctor Urdapilleta, aseguró días atrás que Edelio Morínigo sigue con vida a pesar de las reiteradas amenazas del grupo armado de matarlo. Sin embargo, dejó entrever que los trabajos en torno al caso son cautelosos ante el riesgo de poner en peligro su vida.
Los padres de la víctima, Obdulia Florenciano y Apolonio Morínigo, tras fuerte presión lograron reunirse con el presidente de la República, Horacio Cartes. Durante la reunión, el mandatario explicó a la familia por qué no ordenó a las fuerza de seguridad hacer un operativo de rescate.
“Nos comentó la situación de mi hijo y qué es lo que el Gobierno está manejando sobre los trabajos en la zona norte del país. Nos explicó por qué no se hizo todavía el operativo rescate, porque está en riesgo la vida de mi hijo. Eso nos explicó bastante bien el presidente”, comentó la madre del uniformado.
La madre de Edelio sigue manteniendo la fe en que llegará el momento en que su hijo regrese a su casa.
“No sabemos cuándo va a ser la liberación de mi hijo, ya que no solo está en las manos del Gobierno, porque todos saben qué clase de gente es la que le tiene, pero confío en el trabajo de inteligencia y más aun en Jesucristo”, dijo.