El economista Aníbal Insfrán Pelozo mencionó que la modificación de la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF) a un tope al déficit del 2,5% del PIB que plantean es arriesgado, considerando que aún hay margen para llevar a cabo una mejor recaudación, y cumplir con los compromisos.
Si bien dijo que aumentar el límite del déficit a la mencionada cifra no llega a ser preocupante, empezar a modificar la ley ahora sería muy complicado. “No estoy seguro de la sostenibilidad de un déficit a largo plazo del 2,5%, porque cuando empieza a aumentar muchas veces ya es difícil de controlar, por lo tanto, mantener el 1,5% es prudente”, señaló.
El plan del Gobierno es tener listo el proyecto y presentarlo a mediados de este año, y que entre en vigencia para el Presupuesto 2019. Esto se debe a que para el Presupuesto 2018 no se alcanzarán a cumplir los trámites legislativos y también para evitar suspicacias respecto a que se buscará espacio para más gastos en época electoral.
Al respecto, Insfrán aseveró que teniendo en cuenta que en el Congreso se tratan y aprueban temas en una semana, esa no es una excusa para que el proyecto empiece a regir para el Presupuesto del 2018 y se pueda seguir aumentando el gasto público en plena época electoral.
“Pienso que Paraguay tiene límite suficiente para aumentar la recaudación, buscando la manera de evitar la evasión fiscal; tenemos posibilidad de endeudarnos dentro de este mismo limite (1,5% del PIB), fuentes de repago adecuada. Me parece que subir el déficit es la manera relativamente más fácil, pero a largo plazo no creo que sea la mejor solución”, resaltó Insfrán.
MAYOR FLEXIBILIDAD. Por otra parte, el economista Víctor Gauto, de la consultora MF, destacó que la nueva disposición de modificar la LRF hacia un balance estructural es una propuesta interesante, ya que le daría mayor flexibilidad al Gobierno para mantener un nivel de gasto estable.
“Yo creo que todo eso moderniza nuestra legislación actual, le da un apoyo importante al sector público en la economía; ahora sí, bien sería un paso adelante, según la experiencia que tenemos cuando se aplica una nueva ley hay mucha dificultad en implementarla, lo importante es poner todas las condiciones para que se pueda cumplir y que no sea una mayor complicación para el presupuesto público”, indicó.
Cabe recordar que el ejercicio del 2016 cerró con un déficit de 1,5% del PIB, que representa unos USD 415 millones y de aprobarse el límite a 2,5%, el monto ascendería a unos USD 680 millones aproximadamente.