Los pagos fueron hechos a funcionarios con cargos directivos o de dirección, superior a jefes de departamentos, quienes percibieron complementos salariales adicionales con fuente del Tesoro en el concepto “Bonificaciones por Responsabilidad en el Cargo”.
La Contraloría realizó una auditoría financiera a la ejecución del préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), otorgado a la Secretaría de la Función Pública (SFP), correspondiente al ejercicio fiscal 2013.
El pago de las gratificaciones especiales con fuente de financiamiento externo realizado por la SFP transgredió las disposiciones sobre gratificaciones establecidas en la Ley del Presupuesto General de la Nación, correspondiente al ejercicio fiscal 2013, y no debió ser imputado como parte de las inversiones del programa.
La SFP solicitó ampliación del plazo del Contrato de Préstamo BID N° 1776/OC-PR, adjuntando una planilla de montos comprometidos por un importe de USD 200.012 y que fue autorizada.
De este importe total, la suma de USD 30.425 corresponde, nuevamente, al pago de “Gratificaciones Especiales” a los integrantes de la Unidad Coordinadora de Proyecto, a pesar que el Programa se encontraba en su fase de culminación, con el argumento que sin el pago de estas gratificaciones no se contaría con una Unidad Ejecutora capaz de alcanzar los objetivos propuestos.
Sin embargo, los integrantes de la unidad son funcionarios permanentes de la SFP que perciben complementos salariales con fuente del Tesoro General de la Nación y, por tanto, pueden realizar el seguimiento del cumplimiento de los objetivos establecidos sin la necesidad de erogaciones para el pago de gratificaciones, señala la Contraloría.
La auditoría financiera a la ejecución del préstamo del BID otorgado a la Secretaría de la Función Pública estuvo a cargo de la Dirección General de Economía de la Contraloria General de la República, a cargo de Gladys Fernández.