Para realizar dicha tarea, el diputado por capital, Nito Bogado, dijo que debe haber una cruzada del partido. “Debemos dejar de lado los intereses sectarios y avanzar en una lucha común”, indicó.
No obstante, dijo que para erradicar “un poder paralelo arraigado en el poder público” –refiriéndose a los narcopolíticos– cree necesario que primero se depuren las autoridades del partido, de pie a cabeza.
“No confío en el Tribunal de Conducta y tampoco en este Directorio más allá de que pueda iniciar una depuración. Los cambios deben ser desde las urnas y desde los comités hasta autoridades”, remarcó.
A su turno, el diputado por Central, Édgar Acosta, lamentó la actuación del concejal departamental de Amambay, César Quevedo, a quien instó a alejarse del partido. “En el PLRA deben entender que todos los que estén salpicados con el narcotráfico no tienen cabida”, refirió.
Exhortó al Tribunal de Conducta a que se reúna para tratar la expulsión de los salpicados por el narcotráfico.
“El Tribunal de Conducta debe tomar cartas en el asunto o al menos deben reunirse porque no hace falta esperar a que la Justicia sumarie, en el partido ya se puede tomar una sanción de orden moral”, manifestó.