En su opinión, con una sanción se proyectará la intención de los legisladores de tener una conducta transparente, que vaya siempre con la verdad al electorado, para que este tome sus decisiones en las urnas.
“La conducta de ellos yo considero que es una estafa al electorado. En todo caso, durante la campaña debieron dar a conocer el acuerdo para que el votante tome la decisión de acompañar o no esa lista”, manifestó el legislador.
Ávalos Mariño señaló que la supuesta renuncia se puede rever con la simple expresión de deseo del parlamentario titular.
Para ello –según explicó–, Sawatzky debe presentar otra nota, antes de que se trate en la Cámara su caso, donde exprese que deja sin efecto la intención de dejar su banca.
Indicó que, de igual manera, en plenaria se debería analizar la actitud del legislador colorado.
“Lo que se puede es tratar de, o estudiar o analizar la actitud del colega que está en el ejercicio de la banca”, dijo.
“Si retira la renuncia y sigue al único que le podemos juzgar es a él, y en caso de que si se acepta la renuncia y asuma el suplente, podemos juzgarle al que asume (…)”, agregó.
La semana pasada se dio a conocer un documento donde aparece la firma del diputado Cornelius Sawatzky, expresando su renuncia al cargo de legislador por razones de salud y demás cuestiones de índole personal.
Posteriormente, el parlamentario negó que tenga esa intención y aseguró que, si bien firmó la nota, la misma carece de valor.
Sawatzky reveló que efectivamente firmó la renuncia tras pactar con su suplente que le dejaría la banca a mitad del periodo legislativo si es que financiaba la campaña. Aseguró que su renuncia al final no tiene valor porque Ulrich Stahl no cumplió con su promesa por lo que deja de lado su pacto y su dimisión.
La bancada colorada escuchará la versión del legislador y a partir de allí, sentará una posición.
El confuso caso será analizado en la primera semana de marzo, durante la sesión ordinaria de la Cámara Baja, según se anunció.