En comunicación con ÚH, Sawatzky aseguró que la supuesta renuncia que salió a luz ayer es falsa. “Yo no renuncié, es falsa la nota. Hay un problema con el suplente”, precisó el legislador.
La versión de su dimisión surgió a raíz de una nota que llegó a la Cámara Baja, firmada por el parlamentario, en la que renunciaba de manera indeclinable a su cargo, alegando razones de salud y de índole personal.
En el documento además pide que asuma su suplente, Ulrich Stahl.
El parlamentario, en su afán de desmentir su renuncia, contó que en el año 2012 acordó con quien es su suplente, Ulrich Stahl, que este asumiría su banca a mitad del periodo legislativo, si es que financiaba su campaña política con miras a las elecciones generales de 2013.
Sawatzky reconoció haber firmado ya en el 2012, antes de las elecciones, la nota de renuncia que fue remitida a la Cámara Baja y manifestó que Stahl no cumplió con lo pactado.
“(...) Esa nota es obra de antes, no tiene validez jurídica”, señaló el diputado colorado del Departamento de Boquerón.
La fecha de la nota de dimisión que circuló ayer fue realizada a mano, además, el documento lleva la firma y el sello de una escribana pública de la ciudad de Filadelfia (ver facsímil).
El legislador negó haber firmado el acuerdo ante escribanía, situación que le llama la atención, según dijo.
Las declaraciones del parlamentario dejan en evidencia la manera en que se negocia una banca en la Cámara Baja.
“Si voy a renunciar, lo voy a hacer yo si quiero”, precisó el legislador, quien dejó entrever con esto que hoy no está en su deseo alejarse de la Cámara de Diputados.
Sawatzky adelantó además que presentará una denuncia contra su suplente Ulrich Stahl por la maniobra.
La versión sobre la renuncia del parlamentario confundió incluso al presidente de la Cámara Baja, el colorado Hugo Velázquez, quien tuvo que comunicarse con personas allegadas a Sawatzky para corroborar la información, según trascendió.
Hasta en la oficina del propio Sawatzky la noticia generó una gran confusión.