Los familiares del chico de Arquitectura al percatarse de que el joven se encontraba casi en coma lo trasladaron hasta un centro asistencial para recibir los cuidados necesarios entre ellos un screening toxicológico.
La abuela del afectado culpó a los organizadores del bautismo de someter a su nieto a un descuereo total. “Lo obligaron a correr desde la casa del alumno de tercer semestre, les arrojaron vísceras de animales, heces y luego lo subieron a un vehículo particular hasta la discoteca Coyote”, relató la familiar que pidió ocultar su identidad por temor a represalias.
El ingresante casi entró en coma alcohólico. “Le tiraron a mi nieto como un fardo frente a mi casa. Él es mayor de edad, pero yo lo único que le quiero decir al decano es que es una mentira que no se hacen los bautismos en Arquitectura”, se quejó la abuela.
En el predio de dicha facultad está prohibido terminantemente la realización de bautismo por reglamento. Esto motivó a los organizadores del segundo semestre a llevar la fiesta a una casa particular.
Sorprendido. El decano de la facultad, Ricardo Meyer, explicó ayer que le tomó por sorpresa la noticia del bautismo. “No tenía idea de eso. Lo que te puedo decir es que no se hizo en la facultad, ni siquiera hubo un pedido. Años anteriores se hacía aunque sea eso. Esta vuelta no hubo. Me extraña eso. No sé quién organizó. Eso ya escapa a mi responsabilidad”, refirió.
“Si se usó el nombre de la facultad sin permiso se pueden tomar medidas, pero en la facultad no hubo ninguna publicidad”, aclaró Meyer, quien aseguró que investigará el caso.
Aníbal Visconte, presidente del Centro de Estudiantes, dijo ayer que la organización del bautismo no fue gestionada por el estamento estudiantil a su cargo. “Nosotros organizamos una bienvenida oficial pasando curso por curso. No fue una fiesta este año. El bautismo fue organizado de forma independiente”.